El clip muestra al perro jugando en el agua mientras un cocodrilo de gran tamaño lo acecha aproximándose rápidamente hacia él. También se escucha a un grupo de personas cerca de la orilla intentando llamar al animal.
En cierto momento, el perro voltea su mirada y ladra como si fuera consciente del peligro antes de pegar brincos sobre el agua para dirigirse a tierra firme. Al depredador no le quedó otra que marcharse en busca de otra presa.