Existe evidencia científica que demuestra que interactuar con perros tiene un impacto positivo en la actividad cerebral, generando diversos beneficios para nuestra salud mental y cognitiva.
¿Cómo influye la interacción con perros en el cerebro?
Diversos estudios han demostrado que:
- Reduce el estrés y la ansiedad: Al acariciar, jugar o simplemente estar cerca de un perro, se libera oxitocina, una hormona que promueve la sensación de calma y bienestar.
- Aumenta los niveles de dopamina y serotonina: Estos neurotransmisores están relacionados con el placer, la felicidad y la motivación.
- Disminuye la presión arterial y la frecuencia cardíaca: La interacción con perros puede tener un efecto relajante sobre el sistema cardiovascular.
- Mejora el estado de ánimo: Jugar con un perro puede ser una actividad divertida y placentera que puede ayudar a mejorar el estado de ánimo y combatir la depresión.
- Fortalece las ondas cerebrales asociadas con la relajación y la concentración: Un estudio publicado en PLOS One encontró que interactuar con perros aumenta la actividad de las ondas alfa y beta, lo que se relaciona con la relajación, la concentración y la atención.
- Puede ayudar a reducir los síntomas del trastorno por estrés postraumático (TEPT): Las investigaciones sugieren que la terapia asistida con perros puede ser beneficiosa para las personas que padecen TEPT, ayudándolas a reducir la ansiedad, la ira y los flashbacks.
En resumen, interactuar con perros puede tener un impacto positivo en nuestra salud mental y cognitiva de diversas maneras.
Si estás buscando formas de mejorar tu bienestar, pasar tiempo con perros puede ser una excelente opción. ¡No dudes en buscar oportunidades para interactuar con estos peludos amigos!
