Un delincuente trepó casi 10 metros por un poste de luz y comenzó a desenganchar los cables a plena luz del día y frente a la mirada de todos.
El ladrón explicó que hacía eso porque no tenía trabajo y continuó con la peligrosa tarea de robar cables, ante la mirada de los vecinos e incluso de los trabajadores municipales que estaban instalando cloacas a pocos metros del lugar.