Sí, se puede freír en sal, aunque no es lo mismo que freír en aceite. La sal tiene un punto de fusión muy alto (más de 800°C), lo que la hace ideal para retener el calor y transferirlo a los alimentos.
Esta técnica, llamada suflado en seco, se utiliza principalmente para freír alimentos secos como:
- Palomitas: La sal caliente hace que los granos de maíz exploten y se vuelvan crujientes.
- Botanas: Puedes freír frutos secos, semillas e incluso algunos vegetales como papas y cebollas.
- Otros elementos secos: Algunos cocineros experimentan con freír otros alimentos como tofu, pescado e incluso algunos tipos de carne.
Sin embargo, freír en sal tiene algunas limitaciones:
- No funciona con alimentos húmedos: La humedad de los alimentos húmedos hace que la sal se pegue y no se caliente correctamente.
- No se puede usar para cocinar a altas temperaturas: La sal puede empezar a quemarse y desprender un sabor amargo si se calienta demasiado.
- Dificultad para controlar la temperatura: Es más difícil controlar la temperatura de la sal que la del aceite, lo que puede afectar la cocción de los alimentos.
Si quieres probar a freír en sal, aquí te dejo algunos consejos:
- Utiliza una olla o sartén pesada: Esto ayudará a distribuir el calor uniformemente.
- Calienta la sal a fuego medio: No la calientes demasiado rápido, ya que podría quemarse.
- Agrega los alimentos a la sal caliente: Remueve constantemente para que se cocinen de manera uniforme.
- Escurre los alimentos en papel absorbente: Esto ayudará a eliminar el exceso de sal.
Freír en sal puede ser una alternativa más saludable que freír en aceite, ya que no se necesita usar grasa adicional. Sin embargo, es importante tener en cuenta las limitaciones de esta técnica y usarla con cuidado.
