Tras más de una década viviendo en la capital catalana, junto a quien fuera el amor de su vida, y ahora su expareja Gerard Piqué, puede decirle adiós a todo ese pasado que le produjo hacer el ridiculo mundial. Da paso así a un tratamiento psicologico, lo más lejos posible del padre de sus hijos y de sus exsuegros.

Shakira ha tomado un vuelo privado que la llevará a Miami, donde en dos días se reunirá con sus padres que viajarán en un avión totalmente medicalizado y con supervisión médica. De esta manera, la colombiana pone punto y final a su etapa en España.